Type 2 diabetes and increased HbA1c are associated with deficits in cortical bone microstructure and bone density at the distal tibia, according to research presented at the American Society for Bone and Mineral Research 2014 Annual Meeting
Although it is still uncertain whether the cortical bone deficits explain increased lower leg fracture risks seen in patients with diabetes, the findings identify target areas to investigate the mechanism responsible for skeletal fragility.
Although it is still uncertain whether the cortical bone deficits explain increased lower leg fracture risks seen in patients with diabetes, the findings identify target areas to investigate the mechanism responsible for skeletal fragility.
“Diabetic bone may be characterized by specific deficits to cortical bone, which are not captured by traditional DXA bone mineral density tests,” Elizabeth J. Samelson, PhD, of the Institute for Aging Research at Hebrew SeniorLife, Harvard Medical School,
amelson and colleagues conducted a community-based study involving 627 adults (367 women, 260 men; mean age, 65 years) to compare bone microarchitecture by high-resolution peripheral quantitative computed tomography (HRpQCT) in patients with type 2 diabetes (31 women, 40 men) and healthy individuals and determine relationships with HbA1c.
Participants, all from the Framingham Offspring Cohort, were evaluated for type 2 diabetes and had HbA1c measured at baseline; diabetes was defined as glucose >126 mg/dl or use of diabetes medication. They all underwent HRpQCT scanning at the tibia and radius at 6 years.
The researchers used linear regression to calculate means and correlations for the association between volumetric bone mineral density (vBMD), geometry and microstructure indices of trabecular and cortical bone and type 2 diabetes and HbA1C. Adjustments were made for age, sex and weight.
Patients with type 2 diabetes exhibited higher numbers than healthy patients at the tibia for
total vBMD (291.06 mg/cm3 vs. 284 .53 mg/ cm 3), trabecular vBMD (184.13 mg/cm 3 vs. 175.09 mg/cm3) and trabecular number (2.15 1/mm vs. 2.07 1/mm); the differences were not significant.
Conversely, patients with type 2 diabetes demonstrated significantly lower numbers than healthy patients for cortical vBMD (796.74 mg/cm3 vs. 814 mg/cm3) and cortical porosity (11.17% vs. 10.03%).
Similar results were seen with increasing HbA1c, with trabecular indices better with higher levels but cortical bone indices worse; the significance was limited to trabecular number.
No other differences were seen in HRpQCT bone indices between groups or based on HbA1c level. At the radius, no significant associations were seen between bone HRpQCT indices and type 2 diabetes or HbA1C.
No other differences were seen in HRpQCT bone indices between groups or based on HbA1c level. At the radius, no significant associations were seen between bone HRpQCT indices and type 2 diabetes or HbA1C.
“Older adults with type 2 diabetes have increased risk of fracture but higher bone mass density than those without diabetes,” Samelson said. “ If deficits to cortical bone explain increased skeletal fragility in type 2 diabetes, then future therapies that target cortical bone strength can reduce fracture risk in this vulnerable and growing population.” — by Allegra Tiver
For more information: Samelson E. Abstract 1083. Presented at: American Society for Bone and Mineral Research 2014 Annual Meeting; Sept. 12-15, 2014; Houston.
Tomado de http://www.healio.com/endocrinology/bone-mineral-metabolism
Me parece bastante interesante como en la DM2, aumenta el riesgo de fractura aunque haya mayor densidad osea, que en la población general, y más aún que esto se deba a alteraciones en la microestructura de la cortical del hueso del diabético. Mas allá de estandarizar la búsqueda de HbA1c en el paciente diabético por su relación con la desestructuración de la cortical, creo que sería práctico el agregar a los actuales estudios de densitometría osea, un apartado para la evaluación de la cortical, especialmente en el paciente con DM2. Además creo que sería interesante ver si un buen control de la DM2, un apego al tratamiento, así como un diagnóstico temprano, previenen o disminuyen los efectos sobre la cortical del hueso.
ResponderEliminarun estudio interesante, desconocía que la diabetes también dañaba hueso de ese modo y creo que no solo soy yo si no que mucha gente lo desconoce, no es algo que hubiese pensado, es un estudio que valdría muchísimo la pena comenzar a realizarlo en nuestra extensa población diabética pues es un buen marcador de daño que podría ayudar a los pacientes diabéticos a llevar un mejor control y mantenerlos más al margen con sus tratamientos, creo que para este estudio también se podrían incluir otros aspectos además de la hbA1c como el imc o el hecho de que fumen o ingieran glucocorticoides ya que según el frax son rasgos que influyen en la densidad mineral y el riesgo de fracturas
ResponderEliminarJesús Lara: La relación HbA1c con riesgo de presentar fractura especialmente de tibia en paciente con DM II, sin lugar a duda es algo novedoso y por supuesto con aplicación clínica, más sin embargo, este estudio se centra en pacientes de aproximadamente 65 años, me gustaría que esta nueva herramienta se aplicara a edades más tempranas, pongo como ejemplo la herramienta FRAX ®, la cual evalúa el riesgo de fractura a 10 años en personas de 40 – 90 años, tomando factores de riesgo como edad, peso, estatura, DMO (cuello femoral), fumador, alcoholismo, fractura previa, padres con fractura, DM I, hipertiroidismo, menopausia temprana, entre otros. Algo que resalta, es que no consideran a la DM II con un factor de riesgo, entonces sería una ventaja el modificar y agregar la cuantificación mineral ósea de tibia y no solo del cuello femoral, que si bien en riesgo de mortalidad está más que claro porque se considera el hueso femoral, más sin embargo una fractura sea cual sea, específicamente en este caso de tibia, representa una comorbilidad en la sobrevida de las personas con DM II específicamente, ya sea por su tratamiento y recuperación posterior a la lesión o por la gran variedad de complicaciones principalmente infecciosas de heridas que presentan, ahora que un indicador como la HbA1c, sea el que te de una pauta para sospecha diagnostica de fractura, es algo realmente bueno desde cualquier punto de vista, dígase costo, obtención de la muestra, sensibilidad y como marcador terapéutico. Pero también sería importante el que se mencione el valor de hemoglobina glicosilada relacionada con riesgo de fractura, para poder otorgar un tratamiento correctivo y adecuado de los niveles de glucosa.
ResponderEliminarYo también desconocía que los pacientes con DM II sufrían este tipo de alteraciones óseas. Comparto las ideas de Ligia y de Jesús sobre los criterios FRAX y el realizar un muestreo más amplio para saber si esto depende de la edad o verdaderamente es parte de su fisiopatología. Algo que me llama mucho la atención es saber por que mecanismo se produce ese remodelamiento óseo que lleva a aumentar trabéculas pero perder cortical; es una clase de compensación o es que la trabécula pierde regulación, tiene que ver con la glusosa elevada o en realidad es efecto de algún hipoglucemiante, en fin, creo que aún hay varios retos aquí. También creo conveniente realizar este estudio en pacientes con DM 1 y saber que tanto tienen en común.
ResponderEliminarEl ser diabético ya trae consigo un problema díficil: controlar los niveles de glucosa, y conforme se avanza en estudios se descubren nuevas metas a lograr en nuestros pacientes. Realmente esto tiene implicaciones clínicas? qué es eso que no vemos en los pacientes diabéticos que tiene mucho tiempo sucediendo?
Como bien mencionan la DXA no sirve para detectar este problema. Basta entonces con la Hb A1c para saber que nuestro paciente cae en este grupo de riesgo?
Creo que queda claro que esto me genera más dudas que otra cosa. Supongo que ya hay varias líneas de investigación en marcha sobre este tema y espero ver conclusiones pronto.
PD. soy Raúl Valencia
EliminarIsrael Armida Granados
ResponderEliminarBueno este artículo se me hace muy interesante, yo no me imaginaba que la Diabetes Mellitus tipo 2 también pudiera afectar el hueso de esta manera, aunque no esta al 100 % comprobado si existe aumento o no, del riesgo de fractura, si fuera esto cierto creo que tendríamos que cambiar la forma en que diagnósticamos osteopenia por ejemplo, esto quiere decir que existe una "Osteopenia diabética", lo cual también nos cambiaría todo el panorama del tratamiento, o mejor dicho de profilaxis a otro sistema del cuerpo, ya que los diabéticos tienen muchos mas riesgos de padecer: infecciones, EVC, Infarto Aagudo al Miocardio, etc. Por suerte esto también lo podría tratar el endocrinólogo, y hasta podría formar parte de un nuevo síndrome. Seria muy interesante saber cual es la fisiopatologia exacta, yo opino que puede ser desde una respuesta inflamatoria crónica que inhiba la fisiología de los osteoblastos. O algún producto proteico que no se degrade.
Medina Terán Dafne:
ResponderEliminarComo han expresado mis compañeros, también yo desconocía estas modificaciones óseas que ocurrían en el paciente diabético. Considero que las fracturas en la parte distal de la tibia son, probablemente, las fracturas más difíciles de tratar en los pacientes diabéticos, debido al problema intrínseco que representa la poca irrigación en esa área, sin mencionar la mala circulación de la que sufren los pacientes con DM, lo que hace aún más tardada la sanación de la fractura, si es que llega a curar, porque en muchos casos, nunca llegan a sanar, formándose una pseudoartrosis. Por lo que leí en el artículo, hay esperanza de tratar a estos pacientes de forma más temprana, corrigiendo el déficit cortical, para que éstos pacientes tengan una mejor calidad de vida al evitarse y prevenirse una gran cantidad de fracturas que pudieron no darse en el pasado.
Creo que también cabe resaltar que los criterios FRAX no consideran a la Diabetes tipo II como un factor de riesgo, lo que tal vez ayudaría mucho a nuestra población mexicana, que tiene DM2 y HbA1C elevadísima.
Si se legara a instaurar a la HbA1C como un indicador de osteopenia cortical y porosidad, creo que se modificaría un gran problema de salud pública, muchas complicaciones y hospitalizaciones innecesarias.
Para mala suerte de las personas que sufren Diabetes, ahora también, se descubre esto, por lo que concluyo: PREVENCIÓN DE LA DIABETES MELLITUS 2 SIEMPRE!!!!!
Gracias
Ariadna Zamudio:Es increíble que en la DM2 se muestren este tipo de modificaciones a nivel óseo, habrá que estudiar más a fondo cual es la fisiopatología que causa esta alteración, el hecho de que no se pueda diagnosticar por densitometria ósea es también un dato de interés que habría que revizar también.
ResponderEliminarUna gran ventaja es que los diabéticos tipo 2 no son factor de riesgo, y esto hay que relacionarlo con la población mexicana que muestra niveles de HbA1c muy elevados. Lo que si es evidente es que el adelgazamiento cortical que sufren es efectivanente un riesgo mayor de fractura, ahora esto agregado a todas las complicaciones que tiene un diabético como son : menor irrigación arterial, neuropatía, etc., aumentan aun mas el riesgo de padecer infecciones complicadas y ausencia de consolidación o disminución de ésta, por lo que lo más importante es la prevención y esto solo se logra con una adecuada educación del paciente.
Samuel Santos Segura: Ignorancia total respecto al tema, es increíble lo que cada día se descubre gracias a la tecnología con la que contamos. me parece interesante al igual que mis compañeros como es que disminuye la cortical y aumenta la trabecular, es efecto de la hiperglucemia? los osteoblastos y osteoclastos son afectados por las concentraciones altas de glucosa? Muy interesante muchas cosas más que descubrir y puntualizar. Además de lo que dijieron mis compañeros me gustaría que además en nuestro país el "pie diabético" es la primera causa de amputación no traumática en adultos, la disminución de la cortical tiene que ver con la mayor facilidad de osteomielitis en los diabeteicos, por este estudió creo que si.
ResponderEliminarsería bueno comparar este estudio en pacientes con DM 1, para conocer si tiene el mismo efecto o no.
Concluyo ahora más que nunca que es una realidad: DIABETES ENFERMEDAD MULTISISTÉMICA, muy prevalente en nuestro país, altos costos por complicaciones, y poco a poco hay que promover la Educación y sobre todo la Prevención.
María Fernanda Sanchez.
ResponderEliminarEs increíble como la DM se ha entrometido hasta los rincones mas reconditos del ser humano, y es que este nuevo estudio nos esta demostrando que también tiene afectación osea, y es que nos lleva a una serie de complicaciones mas graves que llevan cada vez mas rapido al paciente diabetico a una productividad nula. Aunque este estudio fue realizado en adultos mayores de 65 años seria interesante realizarlo en adultos jovenes para identificar en que punto de la enfermedad es que comienza la afectacion a hueso. Y es que dia con dia y mientras avanzan las investigaciones nos damos cuenta que la DM se esta volviendo en una enfermedad incapacitante que esta llevando a los adultos a dejar de ser productivos y por ende aumentan los costos para el gobierno, costos cubiertos por la misma poblacion que se convierten en una bomba de tiempo por el aumento de poblacion no productiva y menos la productiva.